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sábado, 16 de agosto de 2008

Culebras aspira a revivir retos de altos vuelos


Mantener el grupo unido, saber torear los vaivenes de la competición y alcanzar un equilibrio entre las estadísticas dentro y fuera de casa. Son varias de las máximas que propone José Antonio Culebras para afrontar el nuevo curso futbolístico. Plenamente convencido de las posibilidades del equipo este año, el central de Puertollano no esconde que desde que llegó siente que Tenerife es una isla que respira fútbol. Por ello, sueña con vivir un año dulce. Sabe que “la ciudad vibraría” y disfrutaría delirante con “el equipo arriba”.

Capitán y voz de la experiencia, el defensor entiende como “tradición del fútbol” las críticas recibidas la temporada anterior, donde la estadística de goles recibidos fue abultada. En cualquier caso, el fútbol carece de memoria, y “todos esos reproches se pueden traducir en halagos”.

El primer resbalón lejos del Archipiélago, un cuento que suena a pesadilla dados los registros de la campaña anterior, llegó en pretemporada. Culebras resta importancia a la derrota ante el Valladolid, considerando “anecdótico” el resultado en un período donde lo fundamental es “captar todo lo que inculca el entrenador en los entrenamientos”.

Una nueva ficha completa el tablero de centrales este año. Con naturalidad, el de Puertollano estima que la llegada de Luna “beneficia al grupo”. Además, no oculta la confianza en sí mismo y en sus “posibilidades” para “ayudar al equipo a estar en los primeros puestos de la categoría”.

En un plano general, uno de los guardianes del vestuario destacó “la magnifica adaptación que están teniendo los nuevos fichajes”. Se trata de profesionales con calidad humana, “el club ha acertado”.

A partir de ahí, aplaude la continuidad de un cuerpo técnico que con especial tesón se muestra detallista en el trabajo con los zagueros esta pretemporada. “Todo se hace más llevadero y la estructura de entrenamientos, comportamientos y hábitos es la misma”, apostilló.

Ambición y paciencia. Entusiasmo y cautela. Y en la retina el privilegio, el deseo de armar un equipo ganador para instalar al equipo en la azotea de la liga. Son las sensaciones que destila un futbolista en cuyo libro de viaje aparecen dos ascensos

Fuente: www.radiomarcatenerife.com

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